jueves, 24 de noviembre de 2022

Tips de estrategias para estar bien emocionalmente

 

Para estar bien emocionalmente, debe existir cierto equilibrio entre los distintos aspectos de nuestra vida, tanto físico como mental. Es normal que a veces una o varias situaciones nos molesten y nos hagan sentirnos de alguna u otra forma desanimados o frustrados, pese a esto y lo difícil que pudiera llegar a ser, nuestro deber es no dejar que este sentimiento “negativo” se convierta en una piedra en nuestro camino, por eso dejaré algunas recomendaciones para balancear este aspecto y estar bien emocionalmente hablando.

1.      Uno de los mejores tips que puedo dar para lograr encontrar paz y/o calma interior es hablar. Platicar con personas cercanas lo que sentimos, de aquello que por equis razón nos está causando conflicto, ya que bajo mi punto de vista, es la mejor manera para liberar estrés, ansiedad y angustia por qué de alguna u otra manera el decir las cosas en voz alta hace que dejemos de mantenerlo oculto, como si quisiéramos que nadie se enterase pero esto no es posible ya que nos la vivimos pensando y sobre pensando bajo nuestro propio criterio, y quizás al contarle a alguien más y recibir un punto de vista diferentes al nuestro, podremos verlo desde otra perspectiva e inclusive encontrar una solución adecuada. Buscar ayuda profesional si lo necesitamos, aprender a aceptar que a veces no podemos solos, está bien. Todo se trata de liberar, de no dejar que eso nos consuma. 

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      Tener buenos hábitos contigo mismo. Preocuparse tanto por tu salud física como mental. Hacer ejercicio y mantenerse activo parar liberar estrés o ansiedad también es una manera muy buena de evitar que aquellos sentimientos nos perjudiquen más. Alegrarse por logros propios, no importa si se refiere a ganar una competencia de baile o incluso gastar tu plato de comida después de mucho tiempo de no haberlo hecho. Todos los días hacemos cosas que seguramente nos enforzamos en obtener, debemos aprender a aplaudirnos más de lo que nos reprimimos cuando nos sale algo mal. Felicitarte a ti mismo por qué sacaste diez en un examen, por qué terminaste un libro, por qué por fin te aprendiste aquella canción que tanto te gusta, por qué pudiste ver una película en inglés, simplemente vivir sabiendo que aunque las cosas no siempre nos saldrán bien o de la manera que esperamos, siempre hacemos cosas por las que nos podemos alegrar.

2.      Relaciones con los demás. Los seres humanos somos por naturaleza sociales, siempre vamos a estar rodeados de varias personas y vamos a necesitar de ellas en más de una ocasión. Fortalecer los lazos de las relaciones con nuestra familia, amigos o pareja nos ayuda a sentirnos más en confianza incluso para platicar de lo que sentimos. Organizar una tarde de juegos de mesa con tu familia o llamar los fines de semana a los amigos para preguntar cómo están; no quedarse solo, más bien fortalecer aquello que ya tenemos. 


¿Quién eres tú?

 

Cuando nos vemos en la necesidad de responder aquel cuestionamiento “¿Quién soy?” es muy probable que respondamos con nuestro nombre, edad, signo zodiacal, etcétera. Pero el cuestionarnos quiénes somos realmente va mucho más allá de nuestra fecha de nacimiento y el nombre que nuestros padres decidieron otorgarnos. Sin embargo, iniciaré con esa presentación de rutina.

Mi nombre es Sidelly, actualmente tengo 17 años, mi signo del zodiaco suele ser aries, aunque a veces me apuntan como tauro; curso el tercer grado de preparatoria en la Prepa 2 y mi color favorito es el morado. Dicho esto, empezaré a responder la pregunta planteada.

Suelo ser una persona bastante tímida y podría decir que en ocasiones también algo impulsiva. Suelo pensar mucho las cosas antes y después de hacerlo, o únicamente después. Mi personalidad se basa en intentar apreciar y disfrutar cada momento e intentar aprender de aquello que me causa conflicto. Rodeada de mucha gente pero no con tantos amigos, me mantengo con personas que me dan paz y felicidad, alejándome de aquellos que me causan incomodidad y cuyo carácter me resulta desagradable. Durante los fines de semana lo habitual es quedarme en casa a leer un libro, ver una película o hacer algo de la escuela, hace poco me di cuenta de que los lugares con mucha gente, lejos de causarme ganas de conocer a más personas, me resultan incómodos y siento mucha presión, por lo que he intentado evitar esas situaciones, no alejándome de aquellas personas a las que quiero, por qué, desde luego sí me gusta conocer gente, solo que en situaciones en las que me sienta cómoda. 

Me emociona mucho escuchar una canción que me gusta, ver una película o leer un libro que me resulte entretenido y gratificante. Cuando algo me pone feliz como por ejemplo, que me salga bien un paso de baile, se lo cuento a mi mamá muy emocionada, esa suele ser mi reacción siempre: al sentirme feliz se lo comparto a alguien. Por otro lado, cuando algo me molesta o de alguna manera me siento decepcionada con mi persona, primero me “regaño” a mí misma y luego se lo cuento a alguien pero la manera de hacerlo es diferente, siempre haciendo referencia a que la culpa es mía, incluso en situaciones en la que la culpa no recae en mí. Me considero una persona que expresa muy bien lo que siente, no siempre de manera verbal, pero lo hago y se nota cuando estoy feliz, triste, molesta, incomoda, emocionada, entre otras emociones. Pese a esto, he de decir que mi mayor complicación está al hablar de lo que siento abiertamente, en especial cuando se clasifica en algún tipio de emoción negativa, por qué se me puede notar mi tristeza o molestia, pero es difícil hablar de ello, por lo que a lo largo de toda mi vida he acudido a reprimir mis emociones en especial cuando se trata de algo que me tiene triste o decepcionada. 





La importancia de las emociones

 

Los seres humanos somos inteligentes, sentimos y experimentamos sensaciones mucho más desarrolladas que el resto de los habitantes del planeta. Las emociones son consecuencias de nuestras experiencias día tras día: cuando ganamos una partida de nuestro juego preferido nos ponemos felices y derivado a ello nos ponemos a saltar; cuando nuestro artista favorito llega a nuestro país pero no podremos asistir a su concierto, nos ponemos tristes, a su vez, quizás lloremos un rato. A lo largo de nuestra vida y crecimiento presentamos dos tipos diferentes de emociones: las positivas y las negativas. Son bastante fáciles de identificar, las primeras son comúnmente relacionadas con sentimientos que nos resulten gratificantes como por ejemplo la alegría, la bondad, el amor. Por otro lado, las negativas son lo contrario, aquellas que nos causan incomodidad, como por ejemplo la angustia, el estrés, la ira, la culpa, la vergüenza, entre otras.

“¿Por qué son importantes las emociones?” Es una pregunta que probablemente te hayas hecho, aunque existe la posibilidad de que no, ya que nuestra sociedad si bien es más abierta comparada a sociedades del pasado, la realidad es que hablar de cómo te sientes en especial en presencia de emociones negativas, suele ser complicado. Lo principal que debemos saber es que las emociones son importantes porqué nos hacen humanos, quienes realmente somos, la manera de expresar una emoción es la forma más auténtica de conocernos, de nuestro ser. Las emociones se nos presentan en momentos y situaciones específicas, con intensidades diferentes y lo que hagamos con esas emociones, será decisión de cada persona, no existen emociones buenas o malas, toda aquella emoción que experimentemos es válida y no podemos solamente ignorar lo que estamos sintiendo. Es parte del ser humano soler ignorar las emociones negativas, pues hemos crecido con la idea de que debemos estar bien siempre. Uno crece y se empieza a dar cuenta que “estar siempre bien” quizás no es la mejor forma de vivir y por lo consiguiente, no es sano. Las emociones tienen importancia puesto que a raíz de lo que sentimos, actuamos, es decir, tomamos decisiones, nos relacionamos con personas específicas, le ponemos nombre a eso que sentimos y a su vez, sobrellevamos y manejamos las situaciones que nos llegan.



Tips de estrategias para estar bien emocionalmente

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